Lo social
Columna de Opinión
Diario de Ávila
Por: Pilar Álvarez.

Ávila está de moda….

A lo largo del año hay fechas especiales llenas de tradiciones y significados, entre ellas nuestra Semana Santa, donde por excelencia España sorprende por los usos y costumbres, donde se recuerda y representa, la pasión y muerte de Jesucristo. Impera en planos diferentes, pero con determinadas constantes que permanecen con el paso del tiempo, adaptándose sin perder su compleja identidad, como es la celebración de los Santos Oficios. La regulación progresiva del culto a las imágenes y su clara finalidad didáctica y devocional, fueron factores que primaron anteriormente sobre los aspectos artísticos, aunque es muy difícil establecer estas gradaciones con total seguridad; lo cierto es que la liturgia de imponente ceremonial y las manifestaciones de devoción hacia Dios, la Virgen y los Santos, son una constante del Catolicismo, y una de sus características más importantes, esgrimida como signo de identidad y diferenciación, cuando la unidad religiosa Europea se rompió en el siglo XVI.

 Después surgieron las cofradías y hermandades, uso el término sinónimos para mayor compresión. Se organizaron muy pronto con un claro sentido de comunidades fraternas, que cumplirían finalidades religiosas y asistencia mutua a sus miembros. Dichas comunidades se  rigen de manera colegiada mediante cabildos que, atendiendo al número de convocados, se califican en Generales, cuando concurren la totalidad de los hermanos y de Oficiales, reservados para la Junta de Gobierno de las mismas. Las autoridades espirituales impusieron la adopción de unos estatutos que regularon su vida interna, refrendando o corrigiendo las ordenanzas redactadas por sus rectores y aprobadas en cabildo general. Dicho documento se denomina "Reglas y Ordenanzas", más conocidas como las Reglas. La identidad de la cofradía se reafirma el día de la festividad de su santo patrón y sobre todo, con motivo de las procesiones del Corpus Christi, Semana Santa o Rogativas.

Se dice que en la semana Santa se contemplan cuatro cosas, el arte, el espectáculo, la pasión y muerte de Jesús, y nuestra propia cultura. La recién terminada semana Santa de Ávila bajo mi punto de vista, ha sido un éxito, buena organización, buen tiempo, muchísimos visitantes, y sobre todo esa representación del arte religioso como es el Cristo de los justicieros, el Cristo de las batallas…. Deberíamos reflexionar ante la perfecta expresión de las mismas, como también la historia que hay detrás de las propias imágenes, lo que representaron en otra época, y lo que siguen representando en este siglo XXI.

Los turistas que nos visitan de otros países, no entienden demasiado bien estas expresiones culturales de nuestra semana Santa. Hay que  hacer país, y expresar con claridad todo lo escrito al principio de esta pequeña columna, creo  que  este año lo hemos logrado, gracias al trabajo llevado a cabo, tanto desde el presidente de las cofradías Emilio Iglesias Velasco, como también desde el Ayuntamiento, atreves de nuestro concejal de turismo Héctor Palencia. El esfuerzo llevado a cabo desde este tándem, dio como resultado que  la semana Santa de Ávila fuera  declara de interés Nacional, y trasmitida a través del canal Internacional al mundo entero, “yo le pondría un eslogan” “Ávila está en el mundo” “Ávila está de moda” y no solo por su semana Santa, sino también porque celebramos el V centenario de nuestra Doctora de Iglesia, Santa Teresa de Ávila. Pero hay más, nos toco en suerte  la representación de las  Edades del Hombre, no se puede pedir más.