Recta final

Columna de Opinión.

Diario de Ávila
Por: Pilar Álvarez

Por fin entramos en la recta final, solo nos queda por celebrar, el día de  Reyes, atrás se ha quedado, nuestro estrés de cara a las Navidades, que por tercer año consecutivo subió, según demuestra el tercer estudio realizado por Nascia, entre los clientes del centro y usuarios de redes sociales.
 

Adiós a nuestras ilusiones, de la  Lotería, de que Papa Noel nos sorprendiera, en fin, pronto tendremos que  asimilar, que hemos empezado un nuevo año, y que solo el trabajo, si es que lo tenemos, nos dará la oportunidad de poder vivir con dignidad, hemos dejado la magia, e ilusión, de que quizás todo pudiera  cambiar en Navidad, seguramente para algunos habrá cambiado, pero para la mayoría en la que me incluyo, nada, solo nos queda él resto del año, para ir superando, día tras día nuestra existencia, con la esperanza de que algún día la suerte nos sorprenda. 

 

Un índice  bastante alto de los ciudadanos, expresan el deseo de que ya pasen las fiestas Navideñas, es que para muchas personas,  la  nostalgia, se hace tan presente en estos días, que más  que alegría, lo que sienten, es  tristeza, y añoranza, de Navidades pasadas, al recordar que en ellas, estaban sus seres queridos, más si el  acoso es constante, durante estas fechas, en las calles, en los centros comerciales, con su márquetin navideño, entonces  la palabra famosa se hace presente  “que rollo de Navidades”.

 

En realidad  también  la  logística de la Navidad en las familias, es algo complicado, y  pocas se han librado de algún conflicto familiar en estas fechas, algo  que se  debería  de haber superado, lo cierto es que va pasando de generación, en generación, como si el tiempo, no le hubiera dado al ser humano, la evolución necesaria para que en estas reuniones, solo esté presente el sentido de respeto, y  amor, que se debe manifestar en la familia. Sin embargo algunos carecen en estas fechas de ese preciado bien, como es, tener una familia, y todo lo que sienten, es esa soledad, que les lleva al tedio, y más en estas fechas tan señaladas, en las cuales lo único que desean es que las noches, pasen pronto, porque así no sienten tanto dolor, nuestras Residencias de Mayores, están en muchos casos llenas de “soledades personales”. Es en la Navidad también el momento propicio para hacerles una visita, para dar algo de nosotros, de nuestro tiempo, ya que muchas veces nuestras cosas pueden esperar, es un buen  momento para retractarse por una ofensa, para acercarse a quien se ha agredido, también para perdonar y olvidar a quien nos agravió, para sorprender con un gesto cariñoso, para repartir nuestro amor a todos aquellos que nos rodean, es tiempo de paz.

 

Pero nos quedan los Reyes Magos, para volver a ver la magia, y la ilusión, de nuestros niños, al contemplar en la cabalgata de Reyes,  ha  esos personajes tan queridos por ellos, como son Melchor, Gaspar, y Baltasar, que  solo de pensar, en esa certeza en la que ellos creen, a una le entra esa nostalgia de volver a ser niño, y creer en algo, sobre todo, para   poder sentir, y decir otra vez, bien venidas las fiestas Navideñas, convencida de que al menos desde esa edad, las cosas tienen ese sentido necesario, e imprescindible de ilusión, sin la cual no se puede vivir