La noche

En el silencio de la noche, la sabiduría penetro en mi cuarto y se quedó en pie junto a mi lecho. Me miro, con la expresión de una madre cariñosa, enjugo mis lágrimas y me dijo.

He escuchado los gemidos de tu alma y he venido a consolarte.

 

Ábreme tu corazón, que yo lo llenare de luz. Pregúntame, que yo te mostrare el camino de la verdad.

 

Atendí su indicación y le pregunte.

 

¿Quién soy yo, y como llegue a este lugar de horrores?

 

¿Qué son estas inmensas esperanzas, estas montañas de libros, y estas figuras?

 

¿Qué son estos pensamientos que vienen y van como bandadas de palomas?

 

¿Qué son está palabras que articulamos con deseo y escribimos con alegría?

 

¿Qué son estas tristes y gozosas conclusiones que abrazan mi alma y envuelven mi corazón?

 

¿De quién son los ojos que me miran y taladran hasta los rincones más recónditos de mi alma y, sin embargo, no se ocupan de mi pena?

 

¿Dime sabiduría que son todas estas cosas?

 

Y la sabiduría abrió sus labios y hablo.

 

Tú eres capaz de ver el mundo, y captar los secretos a través del pensamiento humano.Sal al campo y todo lo que ves fue y sigue siendo tuyo. Los numerosos libros, figuras extrañas y bellos pensamientos que te rodean son fantasmas de espíritus que te han precedido. Las palabras pronunciadas por tus labios son los eslabones que te vinculan a tus semejantes.

 

Las conclusiones tristes y alegres son las semillas del pasado arrojadas en el surco de tu alma, para ser cosechadas en el futuro. Con tus deseos y esfuerzo se abrirá la puerta de tu corazón para que entre la luz. El mundo que se mueve contigo es tu propio corazón. Que es el mundo mismo el hombre es tu hermano lleno de soledades de tristezas, que busca desde la ignorancia la luz, la vida. Así hablo la sabiduría.

 

Se despidió diciendo.

 

Sigue adelante. No te detengas. Avanzar es caminar hacia la perfección. Sigue adelante, sin temor a los abrojos ni a las piedras cortantes del camino de la vida.

 

Talla tu propia piedra, dejando un espíritu nuevo, un libro de palabras, y una figura de hombre evolucionado, una pequeña luz para el profano ciego. Un mundo donde las soledades sean compartidas con todos tus humanos, donde la ignorancia no dañe al hombre, donde la igualdad no sea una metáfora, donde la libertad sea el respeto al hombre, a la vida.

Y entonces comprenderás que los ojos que te miran son los del G:.A:.D:.U:. Que no se ocupa de tu pena, porque sabe que a través de ella, entenderás la pena de tus hermanos, y trabajaras en cadena por todo ser humano que sufre.

 

Algunas estrofas son del libro la Voz del Maestro de KHALIL GIBRÁN

 

Publicado por :Haia