miércoles, 24 de octubre de 2012

Lo más representativo del Amor




Mi querida y personal Hipatía:

Vuelves a tener la valentía y en arrojo de ir en contra de tantas cosas, y vivir los designios de la naturaleza, te expones y sigues apostando por el amor, porque sabes que renunciar a él es vivir menos o no vivir. Sabedora que sentir el amor es más fácil que explicarlo, que el amor no es para entenderlo sino para disfrutarlo, que el romanticismo poético que hay en ti, no soporta ningún tipo de lógica, convencida de que el sentimentalismo además de ingenuo es peligroso, porque el mal de amores nace de las creencias poco realistas.

Que las concepciones erróneas que nos fabricamos son una de las principales fuentes de sufrimiento afectivo, hay que racionalizar el amor, en la justa medida para no intoxicarnos.

O bien, hay que ordenarlo y regularlo, para acercarlo con familiaridad a las neuronas, no para controlarlo, sino para enseñarle a volar, nos enamoramos con un sinfín de palabras que muchas veces son sinónimos del amor, pasión, ternura, amistad erotismo apego, sin precisar lo que es el amor, ni unificar su terminología.

De acuerdo con el filósofo Conte-Sponville cree que el amor podría estudiarse mejor a partir de tres dimensiones básicas, que cuando los elementos logran acoplarse, decimos que estamos en presencia de un amor unificado y funcional.

De acuerdo con las raíces griegas, los nombres que reciben estos tres “amores” son eros (el amor que toma y satisface), philia (el amor que comparte y se alegra) y ágape ( el amor que da y se compadece) pero yo sigo apostando por un amor completo, sano gratificante, que me acerque más a la tranquilidad que al sufrimiento, sabedora de que esto requiere de los tres factores mencionados, deseo (eros ), amistad (philia ) y ternura (ágape).Y creo en la triple condición del amor que se renueva a sí misma, una y otra vez, de manera inevitable, y con ello me vuelvo a referir al principio del escrito.

Mi personal Hipatia,  apuesta por el amor inteligente,  un menú que se activa según las necesidades, todo en su momento, a la medida y armoniosamente, ya que el amor no tiene porque producir sufrimiento, si somos capaces de eliminar las creencias irracionales que la cultura ha inculcado en nosotros. El amor se construye di a día, es convivencia sentida, y en movimiento. Y me  doy cuenta que no se debo detener el tiempo para sentirlo, el aquí y ahora es importante, tambien  porque siento que la pasión es saludable, y no implica perder conciencia.

Buda decía que la ignorancia es el origen de todo sufrimiento psicológico, muchos maestros espirituales llaman la atención sobre la importancia de pensar correctamente.
¿somos ignorantes en el amor?. Me atrevo a decir que sí.
Pero ¿cómo podríamos ser felices sin amor?
¿Y cómo no serlo, cuando se ama?
¿Cómo no amar lo que nos falta?

El amor es uno de los aspectos más importantes en nuestra vida, sin embargo el hombre - y la mujer- de nuestra época no concibe al amor como una asignatura pendiente, como algo para aprender, veo que solo es un sentimiento espontáneo, el enamoramiento, o un deseo sexual, sin preguntarnos.
¿Cómo podemos ser amados?- o- ¿Cómo podemos aprender a amar?

Voy empezar a reflexionar sobre( El banquete de Platón) donde el tema principal fue filosofar sobre el Amor,todos los asistentes tomaron la palabra, me he quedado con alguna que en este momento me aparece oportuna a nivel personal, sin ser la más importante supongo.

El Amor está en los elementos, puesto que es preciso el acuerdo de lo seco y de lo húmedo, de lo caliente y de lo frío, naturalmente contrarios para producir una temperatura dulce y regular. El amor no camina sin Venus, es decir, que no se explica sin la belleza.

El Amor es un Dios, y un Dios muy viejo, puesto que ni los prosistas, ni los poetas, han podido nombrar a su padre ni a su madre, significa sin duda, que es muy difícil sin estudio explicar su origen, es el Dios que hace más bienes a los hombres, porque no consiente la cobardía a los amantes.

El Amor es el mejor de los Dioses, porque es el más justo, puesto que no ofende nunca, ni nunca es ofendido, es el más moderado, puesto que la templanza consiste en dominar los placeres, y no hay un placer mayor que el Amor, el más fuerte, porque ha vencido al mismo Marte, al Dios de la victoria.

Escrito, Hipatia

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